La gestión de cobranzas suele ser uno de los temas más complejos para las empresas, no importa su tamaño o rubro.
Por ello, te entregamos cinco consejos prácticos para que este proceso fluya como corresponde en tu negocio.
𝗣𝗼𝗹í𝘁𝗶𝗰𝗮𝘀 𝗱𝗲 𝗰𝗼𝗯𝗿𝗮𝗻𝘇𝗮𝘀: "Cuentas claras, conservan clientes". Entregar las condiciones previamente o explicalas en el momento de cerrar un negocio. Es transparente para ambas partes y mantiene el proceso de pago como un paso más dentro de la relación comercial.
𝗜𝗻𝗰𝗲𝗻𝘁𝗶𝘃𝗼𝘀 𝗱𝗲 𝗽𝗮𝗴𝗼: El sistema de ofrecer un descuento para los clientes que pagan antes de la fecha de vencimiento no se puede aplicar a todos los rubros, pero en los que se puede, aumenta la satisfacción del cliente en cuanto a la atención.
𝗦𝗲𝗴𝘂𝗶𝗺𝗶𝗲𝗻𝘁𝗼 𝗱𝗲 𝗹𝗮𝘀 𝗰𝘂𝗲𝗻𝘁𝗮𝘀: Envía mails recordatorios respetuosos en caso de retrasos y manten una comunicación efectiva.
𝗔𝘂𝘁𝗼𝗺𝗮𝘁𝗶𝘇𝗮𝗿 𝗲𝗹 𝗽𝗿𝗼𝗰𝗲𝘀𝗼 𝗱𝗲 𝗳𝗮𝗰𝘁𝘂𝗿𝗮𝗰𝗶ó𝗻: Mediante estas herramientas, las facturas se pueden enviar en un día exacto del mes junto a mails de seguimientos o recordatorios.
Si mandas las facturas el mismo día y con una información clara y precisa, los clientes también lo internalizarán dentro de su proceso interno.
𝗙𝗹𝗲𝘅𝗶𝗯𝗶𝗹𝗶𝗱𝗮𝗱: Puedes ofrecer planes de pago a clientes morosos u opciones de pago en línea.
En resumen, un buen sistema de cobranzas implica tener políticas claras y una comunicación efectiva. Integra estos pasos a tu actual sistema de cobranzas y 𝗲𝘃𝗶𝘁𝗮𝗿á𝘀 𝗽𝗿𝗼𝗯𝗹𝗲𝗺𝗮𝘀 𝗳𝗶𝗻𝗮𝗻𝗰𝗶𝗲𝗿𝗼𝘀.
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